De la misma manera que te quedas sin combustible en el auto, y que tienes que cargar una y otra vez, así, tu dedicación y compromiso se termina en el transcurso del tiempo, y necesita renovación constante!
Tienes que dedicarte y volver a hacerlo una y otra vez.
A menudo la gente toma su dedicación por hecho, y entonces la mente empieza a demandar o a quejarse. Cuando la dedicación no es completa, lleva a protestas y quejas.
La dedicación total trae un enorme entusiasmo, cuidado, confianza y desafío, y no deja lugar al ego.