La elección siempre está entre lo bueno y lo mejor, o entre lo malo y lo peor. La elección nunca es entre lo bueno y lo malo. Cuando lo bueno y lo malo están frente a ti, no hay elección. Tu elección es sólo entre lo malo y lo peor, o entre lo bueno y lo mejor. Y cuando es entre lo bueno y lo mejor, ¿por qué debo preocuparme tanto? Está bien, entonces, ¿qué? De todas formas está bien. La elección es siempre la confusión de querer más. Sabés, quieres más alegría, más felicidad, más algo. Eso es bueno hasta cierto límite. Fuera de eso, se convierte en causa de tensión en la vida.