12 de marzo de 2016
La muerte nos pone en contacto con la realidad de la vida. Crea un vacío. El vacío es terreno fértil para la manifestación del espíritu. Los talentos, la inventiva y la creatividad emergen desde el vacío, y la creación tiene una tendencia a retornar a él.
Todos los lugares de culto en todas las religiones están conectados con lugares de entierro/cremación, ya que sólo la conciencia de la muerte puede traer desapasionamiento y asentarte en el conocimiento.
De acuerdo con la mitología india, la morada de Shiva está tanto en el Mote Kailash (Tíbet) como en Smashana (el terreno de cremación).
Kailash significa "donde sólo hay celebración" y Smashana es donde sólo hay vacío. Así es como la divinidad habita en el vacío tanto como en la celebración. Y en ti hay un vacío, en ti hay celebración.