Farouk es un pilar en su Mithellsplain, su comunidad. Trabaja para la Ciudad del Cabo en muchos proyectos que atañe a la juventud en situación de riesgo. Está bien conciente de los desafíos de pobreza a su alrededor, las pandillas- o patotas- y las drogas dentro de su comunidad. Trabaja junto a sus colegas de PELJ para entender cuál es el pensamiento de las pandillas que los atrae hacia ellos.
Trabajando junto a ex pandilleros, Farouk se está concentrando en un plan para introducir el programa PELJ en su comunidad y así darles un sentido de dirección en sus vidas y para mantenerlos lejos de las drogas y de las patotas como una alternativa en sus vidas. El amor de Farouk por su comunidad –pandillas incluídas- es un verdadero ejemplo de buen liderazgo.